David de Almeida / Espiga Pinto
Jun. 21, 2020

David de Almeida / Espiga Pinto

Dos obras, dos autores

En una primera impresión, encontrar puntos de conexión entre la estética de David de Almeida y la Espiga Pinto  puede parecer un desafío. David de Almeida explora en su expresión plástica un detallado estudio de la línea y la forma, apoyado en un abstraccionismo delicado, sensorial, minimalista y sutil desde el punto de vista compositivo. Y Espiga Pinto, a través de los signos representados, lleva consigo elementos de su tierra natal, en una danza de movimiento, luz y color. Si por un lado tenemos un artista que aborda los elementos representados con un gesto puro y pragmático, por el otro tenemos una expresión figurativa rica en elementos.

David de Almeida, Cadencia

Espiga Pinto, Caballo en la fiesta

Estas dos piezas tienen, sin embargo, una conexión rica e interesante entre ellas. Se comunican, no sólo; a través de los tonos tierra, pero también a través de sus significados. El uso del círculo como gesto y como elemento es fundamental. Esta es una característica común en ambos. Con respecto a la composición, podemos observar que las dos obras están divididas. Si en el caso de Cadencia tenemos una obra horizontal dividida al medio por un eje vertical marcado por el uso de un tono sanguíneo en contrapunto con el tono ocre, en Cavalo em Festa  observamos una obra con un valor de verticalidad atravesado por una ruptura horizontal, aunque no tan drásticamente delimitada, pero también conseguida a través del juego de colores.

Después de unos minutos de observación, llegamos a una conclusión: estas dos piezas se comunican. Con la presencia del otro, adquieren nuevas dimensiones y significados y, con seguridad, serán amados. Es difícil permanecer indiferente.

JOANA FIGUEIROA
Consejos de arte - Galería CPS en CCB